REZA Y COMPARTE JUVENIL
SE CONOCE
POR SU FRUTO
GUÍA DE
ORACIÓN JUVENIL del VIII Domingo del Tiempo Ordinario (Ciclo
C)
GUÍA: Gloria a Dios, tú nos conoces y nos amas. Somos conducidos por ti y te reconocemos a nuestro lado. Tu silencio y tu Palabra nos invaden y llaman. Tu Espíritu está con nosotros, agradecemos tus dones y tu presencia. Que tu Palabra dé fruto en nuestra vida. Que tu gracia sacie nuestra sed. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, DE PRESENCIA, DE CAMINO.
https://www.youtube.com/watch?v=vwIUJbIU57s
Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a
los Corintios.
HERMANOS:
Cuando esto corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de
inmortalidad, entonces se cumplirá la palabra que está escrita:
«La muerte ha sido absorbida en la victoria. ¿Dónde está, muerte, tu victoria?
¿Dónde está, muerte, tu aguijón?».
El aguijón de la muerte es el pecado, y la fuerza del pecado, la ley.
¡Gracias a Dios, que nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo!
De modo que, hermanos míos queridos, manteneos firmes e inconmovibles.
Entregaos siempre sin reservas a la obra del Señor, convencidos de que vuestro
esfuerzo no será vano en el Señor.
GUÍA: La muerte ha sido absorbida por tu victoria. Tu resurrección nos
levanta a la vida y nos salva. Te acogemos y recibimos tu luz, tu salvación. Nos
das la victoria por medio de nuestro señor Jesucristo. Lo visualizamos, lo
creemos, lo sentimos presente. Gracias en el hoy y en cada momento en que te
podemos reconocer. SILENCIO DE ACOGIDA, DE PERDÓN, DE ESPERANZA.
Salmo responsorial: Sal 91, 2-3.
13-14. 15-16 (R/.: cf. 2a)
R/. Es bueno darte gracias, Señor.
Lectura del santo Evangelio según san Lucas.
EN aquel tiempo, dijo Jesús a los discípulos una parábola:
«¿Acaso puede un ciego guiar a otro ciego? ¿No caerán los dos en el hoyo? No
está el discípulo sobre su maestro, si bien, cuando termine su aprendizaje,
será como su maestro. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el
ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu
hermano: “Hermano, déjame que te saque la mota del ojo”, sin fijarte en la viga
que llevas en el tuyo? ¡Hipócrita! Sácate primero la viga de tu ojo, y entonces
verás claro para sacar la mota del ojo de tu hermano.
Pues no hay árbol bueno que dé fruto malo, ni árbol malo que dé fruto bueno;
por ello, cada árbol se conoce por su fruto; porque no se recogen higos de las
zarzas, ni se vendimian racimos de los espinos.
El hombre bueno, de la bondad que atesora en su corazón saca el bien, y el que
es malo, de la maldad saca el mal; porque de lo que rebosa el corazón habla la
boca».
GUÍA: Por el fruto los conoceréis. Conocer
a los demás y conocer nuestros frutos, nuestra realidad. Sacar la viga de ojo
propio, antes de querer sacar la mota de otros. La verdad y rectitud velen
nuestros pasos, del corazón saquen el bien que corresponde a nuestros hermanos
y los consuele. Padre, necesitamos tu bondad, tu misericordia, SILENCIO DE
ILUMINACIÓN, DE VERDAD, DE COMPROMISO.
HACEMOS
SÍNTESIS DE NUESTRA ORACIÓN. ¿CON QUÉ FRASE TE QUEDAS?
SENTIMOS
LA PRESENCIA DE JESÚS, NOS UNIMOS A ÉL, COMPARTIMOS SU CAMINO.
INVOCAMOS
A MARÍA, NUESTRA COMPAÑERA DE FE.
NOS
DIRIGIMOS AL PADRE CON LAS PALABRAS DE JESÚS: PADRE NUESTRO...
CANTAMOS:
Vamos hacia Ti, Señor Jesús,
seducidos por tu fiel amor.
Siempre confiando en tu palabra
que habla al corazón.
Junto a ti, Señor, caminaremos,
solo tu mirada bastará
y nos llenará de tu alegría,
de gozo y de paz.
GLORIA A DIOS, GLORIA A DIOS
SIEMPRE SERÁS NUESTRO
SEÑOR. (2)
Tú serás la luz de nuestras vidas,
nos darás tu amor y tu perdón,
nos inundará con tu presencia
tu Espíritu, Señor.
Crecerá en nosotros la esperanza,
viviremos en fraternidad
y proclamaremos por la tierra
que Tú eres nuestro Dios.