REZA Y COMPARTE JUVENIL
ADVIENTO, ESPERAMOS
GUÍA DE ORACIÓN JUVENIL 01-12-19
GUÍA: Adviento significa venida. La Iglesia prepara la venida, el nacimiento de Jesús. Son cuatro
semanas antes del nacimiento de Jesús, sol naciente y salvador de todos los
pueblos. Empieza el año Litúrgico con el
Adviento y a lo largo del año se distribuyen todas las fiestas cristianas. Nuestra
oración se acerca al Padre y al Espíritu que nos dan a
Jesús. Recordamos a María que fue
elegida su madre. SILENCIO DE AGRADECIMIENTO,
ADMIRACIÓN, ENCUENTRO
Lectura de la carta del Apóstol San
Pablo a los Romanos 13,11-14.
HERMANOS:
Comportaos reconociendo el momento en que vivís, pues ya es hora de despertaros del sueño, porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando abrazamos la fe. La noche está avanzada, el día está cerca: dejemos, pues, las obras de las tinieblas y pongámonos las armas de la luz.
Andemos como en pleno día, con dignidad. Nada de comilonas y borracheras, nada de lujuria y desenfreno, nada de riñas y envidias. Revestíos más bien del Señor Jesucristo.
GUÍA: San Pablo anima a los cristianos a vivir como en pleno día con dignidad. La venida de Jesús está cerca. Hemos de prepararnos para recibir su presencia y revestirnos de su gracia. El tiempo es para ir creciendo asemejándonos a él. El desenfreno, las riñas y la envidia que estén lejos de nosotros. Veamos nuestros defectos y corrijamos lo que no nos acredite ante el día de salvación. SILENCIO DE REFLEXIÓN, DE PERDÓN, DE CAMBIO.
HERMANOS:
Comportaos reconociendo el momento en que vivís, pues ya es hora de despertaros del sueño, porque ahora la salvación está más cerca de nosotros que cuando abrazamos la fe. La noche está avanzada, el día está cerca: dejemos, pues, las obras de las tinieblas y pongámonos las armas de la luz.
Andemos como en pleno día, con dignidad. Nada de comilonas y borracheras, nada de lujuria y desenfreno, nada de riñas y envidias. Revestíos más bien del Señor Jesucristo.
GUÍA: San Pablo anima a los cristianos a vivir como en pleno día con dignidad. La venida de Jesús está cerca. Hemos de prepararnos para recibir su presencia y revestirnos de su gracia. El tiempo es para ir creciendo asemejándonos a él. El desenfreno, las riñas y la envidia que estén lejos de nosotros. Veamos nuestros defectos y corrijamos lo que no nos acredite ante el día de salvación. SILENCIO DE REFLEXIÓN, DE PERDÓN, DE CAMBIO.
Del santo Evangelio según San Mateo
24,37-44.EN aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:
«Cuando venga el Hijo del hombre, pasará como en tiempo de Noé.
En los días antes del diluvio, la gente comía y bebía, se casaban los hombres y las mujeres tomaban esposo, hasta el día en que Noé entró en el arca; y cuando menos lo esperaban llegó el diluvio y se los llevó a todos; lo mismo sucederá cuando venga el Hijo del hombre: dos hombres estarán en el campo, a uno se lo llevarán y a otro lo dejarán; dos mujeres estarán moliendo, a una se la llevarán y a otra la dejarán.
Por tanto, estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor.
Comprended que si supiera el dueño de casa a qué hora de la noche viene el ladrón, estaría en vela y no dejaría que abrieran un boquete en su casa.
Por eso, estad también vosotros preparados, porque a la hora que menos penséis viene el Hijo del hombre».
GUÍA: El Hijo
del Hombre llegará cuando menos lo esperemos. Estar en vela es la actitud más
apropiada, si queremos recibirle con atención, y dignos de su venida. La vida se nos ha dado para hacerla
fructificar. Nuestra misión es para bien de la humanidad. ¿En qué podemos
contribuir con nuestras posibilidades, cualidades, talentos? Ocupar nuestro
puesto en este mundo con la mejor coherencia y de forma auténtica, descubriendo
la llegada del Señor, nos llenará de alegría y paz. SILENCIO DE ESPERANZA, ACCIÓN, COMPROMISO.
El Hijo del Hombre vendrá. Estad en vela,
porque no sabéis ni el día ni la hora. Este tiempo de Adviento es para preparar
su venida. Necesitamos fe para reconocerte, esperanza para iluminar nuestras
oscuridades, amor que nos haga capaces de recibirte como te recibió María de Nazaret. SILENCIO DE DESCUBRIMIENTO VIGILANTE, DE ACOGIDA GOZOSA Y PLENA.
RECOGEMOS NUESTRA ORACIÓN: UNA FRASE PARA RECORDAR.
SILENCIO, ADMIRACIÓN, ESPERA, CONFIANZA, ALEGRÍA
INVOCAMOS A MARÍA QUE ESPERA A SU HIJO Y SALVADOR
NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO
CANTAMOS
