REZA Y
COMPARTE JUVENIL
LA DIVINA
MISERICORDIA
GUÍA DE
ORACIÓN J 27-04-25, II Domingo de Pascua o de la Divina Misericordia
GUÍA: Segundo Domingo de Pascua, Domingo
de la Divina Misericordia. Lo celebramos saboreando el amor del Padre, del Hijo
y del Espíritu Santo. El está con nosotros, nos salva, nos redime y nos llena
de su amor. Extendamos ese amor por todos los rincones de la tierra. Que todos
los corazones queden impregnados de su celestial amor. SILENCIO DE
CONTEMPLACIÓN, DE MISERICORDIA, DE PERDÓN.
Lectura
del libro del Apocalipsis (1,9-11a.12-13.17-19):
Yo, Juan,
vuestro hermano y compañero en la tribulación, en el reino y en la constancia
en Jesús, estaba desterrado en la isla de Patmos, por haber predicado la
palabra, Dios, y haber dado testimonio de Jesús. Un domingo caí en éxtasis y oí
a mis espaldas una voz potente que decía: «Lo que veas escríbelo en un libro, y
envíaselo a las siete Iglesias de Asia.» Me volví a ver quién me hablaba, y, al
volverme, vi siete candelabros de oro, y en medio de ellos una figura humana,
vestida de larga túnica, con un cinturón de oro a la altura del pecho. Al
verlo, caí a sus pies como muerto. Él puso la mano derecha sobre mí y dijo: «No
temas: Yo soy el primero y el último, yo soy el que vive. Estaba muerto y, ya
ves, vivo por los siglos de los siglos, y tengo las llaves de la muerte y del
abismo. Escribe, pues, lo que veas: lo que está sucediendo y lo que ha de
suceder más tarde.»
GUÍA: No temas el amor misericordioso del
Padre, del Hijo y del Espíritu Santo se abre a la vida de cada persona y de
todos. Soy el primero y el último. La misericordia del Señor llena la tierra.
Es tiempo de transmitirla y acogerla. Paz, misericordia y alegría. SILENICIO
DE ADMIRACIÓN, DE APERTURA, DE CONSUELO.
Salmo
Sal
117,2-4.22-24.25-27a
R/. Dad
gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia
Diga la casa
de Israel:
eterna es su
misericordia.
Diga la casa
de Aarón:
eterna es su
misericordia.
Digan los
fieles del Señor:
eterna es su
misericordia. R/.
La piedra
que desecharon los arquitectos
es ahora la
piedra angular
Es el Señor
quien lo ha hecho,
ha sido un
milagro patente.
Éste es el
día en que actuó el Señor:
sea nuestra
alegría y nuestro gozo. R/.
Señor, danos
la salvación;
Señor, danos
prosperidad.
Bendito el
que viene en nombre del Señor,
os
bendecimos desde la casa del Señor;
el Señor es Dios, él nos ilumina. R/.
Lectura
del santo evangelio según san Juan (20,19-31):
Al anochecer
de aquel día, el primero de la semana, estaban los discípulos en una casa, con
las puertas cerradas por miedo a los judíos.
Y en esto
entró Jesús, se puso en medio y les dijo: «Paz a vosotros.»
Y, diciendo
esto, les enseñó las manos y el costado. Y los discípulos se llenaron de
alegría al ver al Señor.
Jesús
repitió: «Paz a vosotros. Como el Padre me ha enviado,
así también os envío yo.»
Y, dicho
esto, exhaló su aliento sobre ellos y les dijo: «Recibid el Espíritu Santo; a
quienes les perdonéis los pecados! quedan perdonados; a quienes se los retengáis,
les quedan retenidos.»
Tomás, uno
de los Doce, llamado el Mellizo, no estaba con ellos cuando vino Jesús. Y los
otros discípulos le decían: «Hemos visto al Señor.»
Pero él les
contestó: «Si no veo en sus manos la señal de los clavos, si no meto el dedo en
el agujero de los clavos y no meto la mano en su costado, no lo creo.»
A los ocho
días, estaban otra vez dentro los discípulos y Tomás con ellos. Llegó Jesús,
estando cerradas las puertas, se puso en medio y dijo: «Paz a vosotros.»
Luego dijo a
Tomás: «Trae tu dedo, aquí tienes mis manos; trae tu mano y métela en mi
costado; y no seas incrédulo, sino creyente.»
Contestó
Tomás: «¡Señor Mío y Dios Mío!»
Jesús le
dijo: «¿Porque me has visto has creído? Dichosos los que crean sin haber
visto.»
Muchos otros
signos, que no están escritos en este libro, hizo Jesús a la vista de los
discípulos. Éstos se han escrito para que creáis que Jesús es el Mesías, el
Hijo de Dios, y para que, creyendo tengáis vida en su nombre.
GUÍA: «Paz a vosotros. Como el Padre me ha
enviado, así también os envío yo.» En la presencia del señor, somos confirmados
en la fe, la esperanza y el amor. Somos enviados a comunicar a los hermanos esa
presencia que se derrama y amplía el círculo de la salvación. Todos mensajeros
del Señor y portadores de su evangelio. SILENCIO DE PRESENCIA, DE AMOR, DE
ESPERANZA.
RECOGEMOS
NUESTROS SENTIMIENTOS, LA FE Y ESPERANZA QUE SE AVIVA EN NOSOTROS, EL AMOR QUE
NOS DA EL PADRE EN JESÚS. INTERIORIZAMOS.
CON MARIA
RECORREMOS EL CAMINO DE JESÚS Y AGRADECEMOS SU ENTREGA AL PADRE Y A LOS
HERMANOS.
CREEMOS EN SU RESURRECCIÓN.
NOS
DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS: PADRE NUESTRO…
CANTAMOS
Vive el
Señor, vive… llega…
"Divina Misericordia" En este domingo recordamos la divina misericordia. Hacemos nuestra oración y la ocmpartimos con otros. Dios extiende su misericordia sobre el mundo entero y guía nuestros corazones hacia su paz y amor. Nos unimos a ella. Buen día.
ResponderEliminar«¿Porque me has visto has creído, Tomás? Dichosos los que crean sin haber visto.» Estamos entre los que creen sin haber visto. Pedimos la fe y que sea verdadera.
ResponderEliminar"El está con nosotros, nos salva, nos redime y nos llena de su amor." Su presencia nos llena, fortalece y da alegría.
ResponderEliminar«Paz a vosotros.» Les desea la paz a los discípulos, cuando se deja ver resucitado. Puede ser una señal de resurrección el recibir esa paz del Señor. La construimos en nosotros y a nuestro alrededor. ¿Cómo lo haces tú?
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