GUÍA ORACIÓN JUVENIL 21-07-19
DOMINGO 16 TIEMPO ORDINARIO Ciclo C
GUÍA: Estamos ante el Señor. El Señor nos
ha llamado. No podemos fallarle. Hay muchas cosas que nos distraen pero oímos:
El Señor está ahí y te llama. Bienaventurados los misericordiosos porque ellos
alcanzarán misericordia. Lo escuchamos en nuestra oración y nos sentimos
atraídos por la misericordia de Dios. Él es bueno con todos. Padre, Hijo y
Espíritu abrid nuestro corazón para captar el mensaje y dar respuesta a la
Palabra. ¿Qué lugar ocupamos entre los jóvenes del mundo ? ¿Somos creadores de fraternidad? SILENCIO DE ACOGIDA, DE ESCUCHA, DE
ESFUERZO.
De la carta
del apóstol san Pablo a los Colosenses (1,24-28):
Ahora me
alegro de sufrir por vosotros: así completo en mi carne los dolores de Cristo,
sufriendo por su cuerpo que es la Iglesia, de la cual Dios me ha nombrado
ministro, asignándome la tarea de anunciaros a vosotros su mensaje completo: el
misterio que Dios ha tenido escondido desde siglos y generaciones y que ahora
ha revelado a sus santos. A éstos ha querido Dios dar a conocer la gloria y
riqueza que este misterio encierra para los gentiles: es decir, que Cristo es
para vosotros la esperanza de la gloria. Nosotros anunciamos a ese Cristo;
amonestamos a todos, enseñamos a todos, con todos los recursos de la sabiduría,
para que todos lleguen a la madurez en su vida en Cristo.
Del santo
evangelio según san Lucas (10, 38-42):
En aquel
tiempo, entró Jesús en una aldea, y una mujer llamada Marta lo recibió en su
casa. Ésta tenía una hermana llamada Maria, que, sentada a los pies del Señor,
escuchaba su palabra.
Y Marta se
multiplicaba para dar abasto con el servicio; hasta que se paró y dijo: «Señor,
¿no te importa que mi hermana me haya dejado sola con el servicio? Dile que me
eche una mano.»
Pero el
Señor le contestó: «Marta, Marta, andas inquieta y nerviosa con tantas cosas;
sólo una es necesaria. María ha escogido la parte mejor, y no se la quitarán.»
GUÍA: Marta recibe a Jesús en su
casa. Quiere atenderle, preparar las cosas. Se queja de su hermana que no la
ayuda. Jesús valora a las dos, pero quiere ser escuchado.Nuestro hacer si está
desconectado de Jesús se vuelva pobre. Veamos cómo es nuestra oración. ¿Estará
Jesús contento de cómo escuchamos y actuamos? Hagamos espacio en nosotros para
recibir su Palabra y ponerla en práctica. SILENCIO REFLEXIVO,
ACOGEDOR, CREYENTE.
- VISUALICEMOS NUESTRA ORACIÓN.
- SACAMOS CONCLUSIONES.
- AGRADECEMOS.
- COMPARTIMOS.
CANTAMOS
Gracias,
Señor por tus misericordias
que me
cercan en número mayor,
que las
arenas de los anchos mares,
y que los
rayos de la luz del sol.
Porque yo no
existía y me creaste,
porque me
amaste sin amarte yo,
porque antes
de nacer me redimiste...
¡Gracias
Señor!
Hospedarse en tu templo, nos lleva a la oración y reflexión. Nos unimos a toda la Iglesia y los creyentes.
ResponderEliminar"porque me amaste sin amarte yo,/ porque antes de nacer me redimiste..." El amor de Dios renueva todas las cosas. Gracias, Padre.
ResponderEliminar¡Hospedarse en tu tienda! ¿Lo ves? Es Dios quien llega a nosotros en la Eucaristía, en el hermano, en la Palabra, en la vida. Abramos los ojos,¿Verdad? Gracias, Padre.
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