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viernes, 18 de agosto de 2023

ATIÉNDELA… VIENE DETRÁS

 

REZA Y COMPARTE JUVENIL

ATIÉNDELA… VIENE DETRÁS

ORACIÓN  JUVENIL 20 -08-23  Domingo 20º del Tiempo Ordinario - Ciclo A

 

GUÍA: Momento de oración, nos preparamos con silencio, confianza y fe. Una mujer cananea sigue a Jesús, confía, pide su ayuda. Jesús sigue adelante. Los discípulos interceden por ella. Seguimos a Jesús que se comunica a su Iglesia. Intercedemos por las necesidades de todas las personas y también decimos: Atiéndelas, Señor. Nos unimos al dolor del mundo que necesita nuestra oración. SILENCIO DE OBSERVACIÓN, CONFIANZA, PETICIÓN.

 

Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Romanos (11,13-15.29-32):

Os digo a vosotros, los gentiles: Mientras sea vuestro apóstol, haré honor a mi ministerio, por ver si despierto emulación en los de mi raza y salvo a alguno de ellos. Si su reprobación es reconciliación del mundo, ¿qué será su reintegración sino un volver de la muerte a la vida? Pues los dones y la llamada de Dios son irrevocables. Vosotros, en otro tiempo, erais rebeldes a Dios; pero ahora, al rebelarse ellos, habéis obtenido misericordia. Así también ellos, que ahora son rebeldes, con ocasión de la misericordia obtenida por vosotros, alcanzarán misericordia. Pues Dios nos encerró a todos en la rebeldía para tener misericordia de todos.

GUÍA: Haré honor a mi ministerio, para ver si salvo a alguno. Pablo se siente enviado, a ser testigo de Jesús y a salvar a cuantos pueda. Como bautizados y unidos a Cristo, tenemos esa misión de anunciar el don de Dios a todas las criaturas. En nuestra oración valoramos nuestra entrega y trabajo en favor de las personas que nos han sido confiadas. SILENCIO DE RECONOCIMIENTO, DE UNIÓN, DE COMPROMISO.

 

Salmo  Sal 66,2-3.5.6.8

R/.
 Oh Dios, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben


El Señor tenga piedad y nos bendiga,
ilumine su rostro sobre nosotros;
conozca la tierra tus caminos,
todos los pueblos tu salvación. R/.

Que canten de alegría las naciones,
porque riges el mundo con justicia,
riges los pueblos con rectitud
y gobiernas las naciones de la tierra. R/.

Oh Dios, que te alaben los pueblos,
que todos los pueblos te alaben.
Que Dios nos bendiga;
que le teman hasta los confines del orbe. R/.
 

 

Lectura del santo evangelio según san Mateo (15,21-28):

En aquel tiempo, Jesús se marchó y se retiró al país de Tiro y Sidón.
Entonces una mujer cananea, saliendo de uno de aquellos lugares, se puso a gritarle: «Ten compasión de mí, Señor, Hijo de David. Mi hija tiene un demonio muy malo.» Él no le respondió nada.
Entonces los discípulos se le acercaron a decirle: «Atiéndela, que viene detrás gritando.»
Él les contestó: «Sólo me han enviado a las ovejas descarriadas de Israel.»
Ella los alcanzó y se postró ante él, y le pidió: «Señor, socórreme.»
Él le contestó: «No está bien echar a los perros el pan de los hijos.»
Pero ella repuso: «Tienes razón, Señor; pero también los perros se comen las migajas que caen de la mesa de los amos.»
Jesús le respondió: «Mujer, qué grande es tu fe: que se cumpla lo que deseas.»
En aquel momento quedó curada su hija.

 

GUÍA: Ten compasión de mí. Mi hija tiene un demonio malo. La madre implora ayuda para su hija. Cuántas oraciones en favor de otros. Padres y madres oran por sus hijos. Hijos que ruegan por sus padres. La oración nos une, nos hace solidarios, nos fortalece en la fe. Colaboramos con otros. SILENCIO DE CONFIANZA, ESCUCHA, AGRADECIMIENTO.

 

·       PONEMOS NUESTRA ORACIÓN EN TUS MANOS, PADRE, ACOGEMOS TU PALABRA, AYÚDANOS A RECIBIR TU PAZ.

·       MARÍA CONTIGO NOS ACERCAMOS AL ALTAR, ENSÉÑANOS A ORAR.

·       NOS DIRIGIMOS AL PADRE CON LA ORACIÓN DE JESÚS, Y UNIDOS A ÉL DECIMOS: PADRE NUESTRO...

 

CANTAMOS

Somos un pueblo que camina

Somos un pueblo que camina

y juntos caminando

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Somos un pueblo que camina

que marcha por el mundo

buscando otra ciudad.

Somos errantes peregrinos

en busca de un destino

destino de unidad.

Siempre seremos caminantes

pues sólo caminando

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Danos valor para la lucha

valor en las tristezas

valor en nuestro afán.

Danos la luz de tu Palabra

que guíe nuestros pasos

en este caminar.

Marcha Señor junto a nosotros

pues sólo en tu presencia

podremos alcanzar

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

 

Dura se hace nuestra marcha

andando entre las sombras

y en tanta oscuridad.

Todos los cuerpos desatados

ya sienten el cansancio

de tanto caminar.

Pero tenemos la esperanza

de que nuestras fatigas

al fin alcanzarán

otra ciudad que no se acaba

sin penas ni tristezas

ciudad de eternidad.

https://www.youtube.com/watch?v=IVrKSK7l9jY

3 comentarios:

  1. "Atiéndela... viene detrás" La fe de la mujer y la mediación de los discípulos consiguen la curación para la hija de aquella mujer. Nuestra oración nos acerca a las personas que sufren, nos lleva a cuidar de ellas, ser mediación y a tener fe en Jesús. Oramos.

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  2. "Los dones y la llamada de Dios son irrevocables". Agradecemos a Dios esta llamada y elección para nosotros y para todos. Buen día.

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  3. S. 66 "Oh Dios, que te alaben los pueblos, que todos los pueblos te alaben". Unidos a toda la tierra cantamos la alabanza y agradecemos a Dios sus beneficios.

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